CUARESMA DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL.
Esta devoción en honor a San Miguel Arcángel es un período de cuarenta días de ayuno, oración y penitencia que va desde la Fiesta de la Asunción, el 15 de agosto, hasta el 29 de septiembre, día de la fiesta de San Miguel.
San Francisco de Asís, quien fue profundamente devoto de San Miguel, practicó esta devoción. En la biografía de San Buenaventura y en el libro Las florecillas de San Francisco, un libro de historias sobre San Francisco hacen referencia a la cuaresma de San Miguel.
Dos años antes de su muerte, San Francisco pasó la Cuaresma de San Miguel en una montaña llamada La Verna y aquí, recibió las llagas de la Pasión de Nuestro Señor, los estigmas. Los franciscanos celebran la recepción de los estigmas por parte de San Francisco con una fiesta el 17 de septiembre.
La Cuaresma de San Miguel, como la Cuaresma original, excluye los domingos. Se puede practicar de varias formas, algunos sacerdotes recomiendan:
- Hacer un altar en honor a San Miguel.
- Elegir una penitencia para practicar todos los días de la cuaresma excepto los domingos.
- Hacer la oración a San Miguel, las letanías o la coronilla a San Miguel.