Hoy es el es el día de la Sagrada Familia, fiesta que celebramos el primer domingo después de Navidad o el 30 de diciembre (cuando el día de Navidad es un domingo y el domingo siguiente es primero de enero día en el que celebramos la Solemnidad de Santa María, Madre de Dios).

Hoy es un buen día para orar por nuestros familiares y consagrar nuestra familia a la Sagrada Familia. Hay varias oraciones, estas son algunas que se encuentran en esta página:

• Oración de San Juan Pablo II a la Sagrada Familia.
• Oración de Santa Teresa de Calcuta por la familia.
• Oración del Papa Benedicto XVI a la Sagrada Familia.
• Oración del Papa Francisco a la Sagrada Familia.

Esta es una historia tomada del libro Año Virgíneo:

Narra la historia que el padre Fray Gerónimo de la orden religiosa de los capuchinos, caminaba con un compañero desde Roma hasta Candia a una misión del Papa. En la noche perdieron el camino y sin nada que comer, en un lugar donde merodeaban las fieras, se llenó de miedo.

El padre le dijo al compañero muy afligido: Confiemos en la poderosa Señora que no ha de querer que perezcan sus siervos y aunque indignos pongámonos en oración. Así lo hicieron y después de un tiempo el compañero del sacerdote aquejado por el hambre dijo:

«Padre ya hace rato que rezamos y mi estomago sigue vacío. Encomendemos esta causa a un Santo que haya dado de comer». El padre admiró la sencillez del compañero y le dijo que buscara entre todos los santos uno que haya dado de comer y el hermano dijo: «Ya lo tengo, quien más que San José que socorrió en esta vida cuando tenía hambre, al que nos puede socorrer ahora, al Niño Jesús. Quién le daba de comer, sino San José. Pues a este Santo me quiero encomendar, para que interceda por nosotros».

Se pusieron otra vez en oración, y al rato vieron no muy lejos, resplandecer una luz. Se encaminaron hacia ella. Llegando a una pequeña casa muy limpia en donde estaban un anciano, una madre y su hijo, todos de una hermosura incomparable. Les recibieron con mucho agrado e inexplicable caridad. La mesa estaba preparada con platos suculentos y los invitaron a comer.

Acabada la cena, el anciano le dijo que apenas salieran de la casa encontraban el camino y que ahora se retirasen a descansar. Al amanecer se hallaron en un prado junto a un camino sin que viesen casa, ni señales que la hubiese habido. Atónitos y contentos juzgaron que los tres que los habían hospedado eran San José, la Virgen María y el Niño Jesús. Se arrodillaron, dieron gracias a Dios y siguieron su camino.

¡SAGRADA FAMILIA DE NAZARET JESÚS, MARÍA Y JOSÉ, BENDECID NUESTRA FAMILIA!

«Al celebrar hoy la fiesta de la Sagrada Familia recordamos que cada familia humana debe ser reflejo de la belleza del amor divino y fundamento de una civilización del amor. Demos gracias a Dios por nuestras familias, pidiéndole que las bendiga y las conserve siempre unidas por los vínculos de su amor».

«Reflexionando sobre el amor recíproco de Jesús, María y José, vemos que Nazaret es una especie de escuela donde podemos empezar a descubrir la vida de Cristo y comprender su Evangelio. Que la paz de la Sagrada familia esté siempre en vuestro hogar y os llene de alegría».

«En la fiesta de la Sagrada Familia, contemplamos el misterio del Hijo de Dios que vino al mundo rodeado del afecto de María y de José. Invito a las familias cristianas a mirar con confianza el hogar de Nazaret, cuyo ejemplo de vida y comunión nos alienta a afrontar las preocupaciones y necesidades domésticas con profundo amor y recíproca comprensión».

Papa Benedicto XVI. Diciembre, 2010.