BENDICIÓN, SECRETO PARA LA SALVACIÓN.
En diferentes momentos de la historia podemos ver el poder que tiene la bendición de Dios. En las Sagradas Escrituras, Jesús nos muestra la importancia de bendecir cuando da de comer a una multitud hambrienta:
“Y Jesús tomó en sus manos los cinco panes y los dos pescados y mirando al cielo pronunció la bendición y partió los panes y los dio a sus discípulos y ellos los repartieron entre la gente. Todos comieron hasta quedar satisfechos; recogieron los pedazos sobrantes y con ellos llenaron doce canastas. Los que comieron fueron cinco mil hombres sin contar las mujeres y niños». (San Mateo 14, 13-21).
Y también leemos como, mientras una bendición reverdece y multiplica, una maldición produce el efecto contrario:
“Y dijo Pedro a Jesús: Maestro la higuera que maldijiste se ha secado”. (San Marcos 11, 20).
Grandes Santos han logrado numerosos milagros gracias al poder de la Bendición. Por ejemplo, San Juan Evangelista logró neutralizar el efecto del veneno de una copa de vino por medio de la bendición. También San Benito Abad, al bendecir una copa envenenada eliminó el efecto del veneno haciendo la Señal de la Cruz, y de la copa salió una serpiente, como podemos ver en la imagen de la medalla de San Benito.
San Antonio de Padua fue invitado a una comida y los que lo invitaron le pusieron veneno con el fin de matarlo. San Antonio se dio cuenta del veneno, bendijo la comida y comió sin sufrir daño alguno.
San Patricio se enfrentó con los druidas y obró varios milagros usando una hoja de trébol y pronunciando la siguiente bendición: “En el Nombre de la Santísima Trinidad Padre, Hijo y Espíritu Santo”.
La Santísima Virgen María dijo a un sacerdote (Padre Álvaro de Jesús Puerta en Soracá, Boyacá):
“Mis pequeños sean mi bendición, bendigan siempre… necesito bendecir en ustedes y por ustedes. Bendigan en todo momento, los hago mi bendición.
Ustedes son mi bendición, Dios es nuestra mas grande bendición. Si supieras la grandeza de la bendición, si supieras que todo es una bendición. El cielo es una bendición, tu vida es una bendición. Bendice mi pequeño porque Satán teme a la bendición. necesitamos vencer a Satán con la bendición.
Enseñen a bendecir, a hacer el signo de la Cruz siempre, en todo momento. Bendícete siempre ¿Por qué no bendices mi pequeño?. Por que no bendices si allí está todo el secreto de la salvacion de Dios”
El Señor enseñó a Moisés a bendecir de la siguiente forma:
“El Señor te bendiga y te guarde; haga respladecer su rostro sobre ti y te conceda su favor, te muestre su Rostro y te conceda la paz”. (Numero 6, 24-26)
La bendición al final de la Santa Misa es muy importante y se debe recibir de rodillas porque la Santísima Trinidad baja al altar y por medio del sacerdote bendice a la comunidad.
“Que la bendición de Dios Todopoderoso Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes”.
Pidamos en este inicio de año la bendición a Nuestra Santísima Madre María Auxilio de los Cristianos:
Bendíceme María Auxiliadora que Tu bendición Santísima esté noche y día sobre mi y los míos en este año 2024.