El 25 de marzo es una fecha muy importante para todos los cristianos. Según el calendario judío nuestro Señor Jesús murió en la Cruz el día 15 de Nisán, que ese año fue viernes y correspondió al 25 de marzo en el Calendario Romano.

Según la tradición judía, un gran Hombre iba a morir el mismo día de su Concepción, por eso se estableció como la fecha de la Anunciación y Encarnación el 25 de marzo y, teniendo en cuenta esta fecha, se fijó el día de Navidad el 25 de diciembre, nueve meses después de la Anunciación.

Cuando 25 de marzo cae durante la Semana Santa, la Solemnidad de la Anunciación se celebra el lunes después de la Octava de Pascua.

El día de la Encarnación del Hijo de Dios en el vientre Virginal de María, es uno de los días más importantes de la historia de la humanidad porque, con el «Fiat» de nuestra Santísima Madre, inició nuestra Redención. Por eso es bueno tener presente este gran día y rezar el Ángelus o hacer el Santo Rosario para recordar el saludo del Arcángel San Gabriel a la Santísima Virgen María en cada Ave María.