Santo Tomás de Aquino nació en Roccasecca, Italia, en el año 1225, en una familia noble: su padre era conde de Aquino y su madre condesa de Teano.

Sus hermanos eran soldados y tenían una constitución corporal atlética, eran altos y fuertes, por el contrario, Santo Tomás tenía una constitución corporal diferente, era más introvertido y le gustaba mucho estudiar filosofía y teología.

Cuando decidió entrar a los Dominicos, sus hermanos lo pusieron preso por más de un año en el castillo de la familia, la fortaleza de San Giovanni en Roccasecca, e intentaron por varios medios disuadirlo para dejar su vocación.

Un día llevaron a su cuarto a una mujer para que tratara de seducirlo y Santo Tomás la sacó del cuarto con un tizón encendido, luego se arrodilló implorándole a Dios que le concediera la gracia de tener siempre pureza de alma y cuerpo. Ese día tuvo una visión en la que dos ángeles se le aparecieron, le pusieron un cinturón blanco, y le dijeron: “Te ceñimos con el cinturón de la castidad perpetua”. (Por eso en la foto aparecen dos ángeles poniéndole un cinturón).

Después de ser liberado, fue enviado a estudiar a Colonia, Alemania. Uno de sus maestros fue el Padre Dominico San Alberto Magno. 

Santo Tomás era muy inteligente pero por su forma de ser y su apariencia sus compañeros de clase le pusieron el apodo: “El buey mudo”. Un día, uno de sus compañeros leyó los apuntes Santo Tomás y se los entregó a San Alberto, quien al leerlos, dijo a los estudiantes: “Ustedes lo llaman el buey mudo. Pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero”.

Santo Tomás tenía un amor muy grande por la Sagrada Eucaristía y por el Santísimo Sacramento. Es el autor de tres de los himnos más hermosos: Adoro Te Devote, Pange Lingua Gloriosi, y Tantum Ergo. Decía que su sabiduría venía más de la adoración a la Santa cruz que de la lectura de libros. También tenía un gran amor a la Santísima Virgen María y compuso un tratado acerca del Ave María.

Frecuentemente se encontraba abstraído y en éxtasis. En una ocasión, después de haber terminado un tratado sobre la Eucaristía, tres de sus hermanos lo vieron en éxtasis, y oyeron una voz que salía del crucifijo sobre el altar que decía: “Bien has escrito de mí Tomás, ¿Qué recompensa tendrás?”, Santo Tomás respondió: “Señor: lo único que yo quiero es amarte, amarte mucho, y agradarte cada vez más”.

Murió el 7 de marzo de 1274 en el monasterio cisterciense de Fossa Nuova, cuando estaba enfermo y le llevaron la Sagrada eucaristía dijo: “Ahora te recibo a Ti mi Jesús, que pagaste con Tu sangre el precio de la redención de mi alma. Todas las enseñanzas que escribí manifiestan mi fe en Jesucristo y mi amor por la Santa Iglesia Católica, de quien me profeso hijo obediente”. 

El Papa Juan XXII lo canonizó el 18 de julio de 1323. Fue declarado Doctor de la Iglesia por el Papa San Pío V el once de abril de 1567. Es conocido como “Doctor Angélico” y fue nombrado Santo Patrono de las universidades, colegios y escuelas católicas.

ADORO TE DEVOTE:

LATIN:	ESPAÑOL:
Adóro te, devóte, latens déitas,	Te adoro con devoción, Dios escondido,
Quæ sub his figuris vere latitas.	oculto verdaderamente bajo estas apariencias.
Tibi se cor meum totum súbjicit,	A Ti se somete mi corazón por completo,
Quia te contemplans, totum deficit.	y se rinde totalmente al contemplarte.
Visus, tactus, gustus in te fállitur,	Al juzgar de Ti se equivocan la vista, el tacto, el gusto,
Sed audítu solo tuto creditur;	pero basta con el oído para creer con firmeza;
Credo quidquid dixit Dei Fílius:	creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios;
nil hoc verbo veritatis verius.	nada es más verdadero que esta palabra de verdad.
In Cruce latebat sola deitas,	En la Cruz se escondía sólo la divinidad,
at hic latet simul et humanitas;	pero aquí también se esconde la humanidad;
ambo tamen credens atque cónfitens,	Creo y confieso ambas cosas,
peto quod petivit latro pœnitens.	y pido lo que pidió el ladrón arrepentido.
Plagas, sicut Thómas, non intúeor,	No veo las llagas como las vio Tomás,
Deum tamen meum te confíteor;	pero confieso que eres mi Dios;
Fac me tibi semper magis credere,	Haz que yo crea más y más en Ti,
in te spem habére, te dilígere.	que en Ti espere, que te ame.
O memoriále mortis Dómini!	¡Oh memorial de la Muerte del Señor!
Panis vivus, vitam præstans hómini;	Pan vivo que da la vida al hombre;
præsta meæ menti de te vívere,	concédele a mi alma que de Ti viva,
et te illi semper dulce sápere.	y que siempre saboree Tu dulzura.
Pie pellicáne, Iesu Dómine,	Señor Jesús, bondadoso pelícano,
me immúndum munda tuo sánguine:	límpiame a mí, inmundo, con Tu Sangre,
cuius una stilla salvum fácere	de la que una sola gota puede liberar
totum mundum quit ab omni sælere.	de todos los crímenes al mundo entero.
Iesu, quem velátum nunc aspício,	Jesús, a quien ahora veo escondido,
oro, fiat illud quod tam sítio;	te ruego que se cumpla lo que tanto ansío:
ut te reveláta cernens fácie,	que al mirar Tu rostro ya no oculto,
visu sim beátus tuæ gloriæ.	sea yo feliz viendo Tu gloria.
Amen.	Amén.