En el lugar de Sicilia, llamado Sant’Angelo, sucedió este caso:

El Pirata Moro Barbarroja después de haber saqueado algunos lugares cercanos y de haber cautivado a muchas personas de esta provincia, decidió atacar a Sant’Angelo con un ejército poderoso, pero antes de atacar, decidió profanar el templo de la Santísima Virgen María que estaba antes de llegar al lugar.

Cuando estaban ya listos para atacar el templo, de este salió una gran luz, la cual fue creciendo poco a poco y que les hizo voltear el rostro hacia otro lado. Aunque no sabían de dónde provenía la luz, pensaron que era el resplandor del sol y decidieron atacar.

De pronto, una gran luz cegó a Barbarroja y a sus soldados, con lo cual tuvieron tiempo los del lugar de salir y dar con ellos, matando a muchos y poniendo en fuga a los que quedaron.

Entraron al templo a dar gracias a la Santísima Virgen María porque los había auxiliado, y hallaron que la Santa Imagen que estaba pintada en una pared se había bañado de Sudor de Sangre de donde salía esa luz poderosa. Esto sucedió en el año 1544.

(Historia fue tomada del libro el Año Virgíneo).

¡SANGRE DE CRISTO, SOCORRO EN EL PELIGRO SALVANOS!

ORACIÓN:

Oh Virgen María, por el triunfo de Tu Corazón Inmaculado, Dios te ensalzó como medianera de todas las gracias. En Tu elevada y poderosa posición te saludamos. Soberana y Reina de la Preciosa Sangre en este instante coloca un círculo de protección infinita con esta Preciosa Sangre alrededor de nosotros y de toda nuestra familia para que los demonios huyan cuando la miren. Amén.

Nota: en varias ocasiones las imágenes de la Santísima Virgen María han tenido sudor o lágrimas de Sangre, como en Naju (Corea del Sur) en donde hicieron pruebas y se demostró que era Sangre humana o en Akita (Japón).