SEGUNDO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS: SOLEMNIDAD DE CORPUS CHRISTI.
Hoy celebramos la Solemnidad del Corpus Christi. En este día recordamos las palabras de Jesús:
«Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo. Si alguno come este pan vivirá eternamente; y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo».
“El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y Yo lo resucitaré el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en Mí, y Yo en él”.
Hoy es posible ganar indulgencia plenaria:
“Se concede una indulgencia plenaria a los fieles que participen devotamente en una procesión Eucarística solemne, celebrada dentro o fuera de una iglesia, en la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo”. (Manual de indulgencias).
Para obtener esta indulgencia, los fieles que participen en la procesión Eucarística también deben cumplir las tres condiciones habituales:
– Confesión.
– Recibir la Sagrada Comunión.
– Orar por las intenciones del Santo Padre: La Iglesia sugiere un Padre Nuestro y un Ave María.
ORACIÓN DE SANTA MARÍA FAUSTINA A JESÚS EN EL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR:
Te adoro, Creador y Señor escondido en el Santísimo Sacramento. Te adoro por todas las obras de tus manos que me revelan tanta sabiduría, bondad y misericordia. Señor, has esparcido tanta hermosura sobre la tierra y ella misma me habla de Tu belleza. Sin embargo, se trata tan sólo de pálidos reflejos de Ti, belleza incomparable.
A pesar de que le hayas escondido y hayas ocultado tu belleza, mis ojos iluminados por la fe te alcanzan y mi alma reconoce a su Creador, su sumo bien, mientras mi corazón se sumerge enteramente en la oración de la adoración.
La oración completa de Santa María Faustina se encuentra en este enlace: Oración de Santa María Faustina al Santísimo Sacramento.