Del cielo ha bajado la Madre de Dios
cantemos el ave a Su Concepción.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

El Lourdes de Francia su trono fijó,
mirando a España que no abandonó.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

De luz rodeada y eterno esplendor,
la reina del cielo así apareció.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Un traje vestía de blanco color
que el talle ajustaba azul ceñidor.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Un largo Rosario que el cielo labró
sostiene en sus manos más puras que el sol.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Por detrás Su cuerpo todo alrededor,
gracioso envolvía un largo mantón.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Sus pies virginales desnudos dejó,
y en ellos dos rosas de eterno candor.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

“vendrás quince días te pido en favor:
hacer de esta gruta lugar de oración”.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

yo quiero que un templo se eleve en mi honor,
que vengan mis hijos aquí en procesión.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

“haced penitencia y ardiente oración
por los pecadores que ofenden a dios”.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

y en prueba a mis hijos, de mi protección:
“bebed en la fuente”, porque ella es mi don.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Sus aguas benditas medicina son
que al cuerpo y al alma dan la curación

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Aquí los enfermos encuentran vigor,
aquí luz y vida halla el pecador.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Yo soy la hermosura que refleja a Dios.
Yo soy toda pura en mi concepción.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Unida a tu hijo al pie de la cruz,
imploras del padre piedad y perdón.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Pues eres, maría, la reina de paz:
despierta en nosotros anhelos de amar.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Del sol de justicia espejo eres tú,
despierta en mi alma senderos de luz.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Enséñame madre, a dar el perdón,
abriendo los brazos a quien me ofendió.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Si el mundo nos paga el bien con el mal,
recuérdanos, madre, el triunfo final.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

La virgen maría sonríe de amor,
cuando oye a sus hijos
tan grata canción.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Son siempre los niños imán de su amor
y allí a Bernardita su gloria mostró.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Venimos al templo con santo fervor,
a cantar las glorias de su intercesión.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

El mismo saludo que el ángel te dio
repitan tus hijos cantando a una voz.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Cantad a María, cantad en su honor
modelo de entrega, servicio y amor.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Allí vio en la roca radiante de luz
la dama vestida de blanco y azul.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!

Su rara hermosura profunda emoción
causó en Bernardita que absorta quedó.

¡Ave, Ave, Ave María!
¡Ave, Ave, Ave María!