Dice La Santísima Virgen María a Santa Brígida de Suecia: “Nada me agradaba sino sólo Dios. Siempre deseé en mi corazón vivir hasta el momento de su nacimiento, y tal vez merecer
EL DÍA DE LA ENCARNACIÓN. Tomado del libro Mística Ciudad de Dios de María Jesús de Agreda. En la plenitud de los tiempos, determinó el Altísimo enviar a su Hijo Unigénito al mundo. Habló el